En la capital la inseguridad se disparó en meses recientes, en especial los secuestros que afectan a todas las capas sociales.
Los perpetradores exigen exorbitantes sumas de dinero para liberar a las víctimas, incluso llegaron a pedir un millón de dólares a cambio de la vida de Maritza Beaubrun, esposa del jefe de seguridad del Palacio Nacional, revelaron medios locales.
En este contexto, el primer ministro Joseph Jouthe reconoció la problemática y aseguró que las acciones gubernamentales darán resultado en breve tiempo, aunque no detalló ninguna medida concreta.
También pidió a los padres estar alertas, mantenerse vigilantes y educar a los menores, declaraciones que recibieron rechazo por organizaciones de la sociedad civil, que señalan la inacción del gobierno ante este fenómeno.
Jouthe admitió que la situación es grave pues no solamente siembra el terror entre los ciudadanos, sino que afecta la economía familiar y bloquea el funcionamiento de la sociedad.
En la última semana, al menos 14 personas fueron secuestradas, entre ellos extranjeros, sin embargo, las cifras son aún más alarmantes, de acuerdo a organizaciones de derechos humanos.
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